La elevación congénita de la escápula o deformación de Sprengel forma parte de las anomalías congénitas de la cintura escapular. Aunque con el paso de los años se han descrito numerosas técnicas quirúrgicas, el tratamiento actual se basa en dos intervenciones principales. Las indicaciones dependen del grado de limitación funcional y de la repercusión estética. El origen de esta malformación es un defecto de migración distal, pero la escápula en sí misma así como los músculos circundantes presentan diversas anomalías que deben corregirse si se pretende obtener un descenso suficiente para restaurar la función y obtener un aspecto sensiblemente simétrico de los hombros. Es la razón por la que se han descrito numerosas intervenciones dirigidas a la escápula, a los músculos o incluso a ambas estructuras a la vez.