El ángulo pontocerebeloso (APC) es una región anatómica que contiene abundantes elementos vasculonerviosos, lo que explica que el modo de revelación frecuente de las diferentes patologías sea una afectación de los nervios craneales que circulan por él. La patología del ángulo pontocerebeloso es muy variada, pero está dominada por las patologías tumorales como, por orden de frecuencia, el schwannoma vestibular, el meningioma y el quiste epidermoide. La resonancia magnética (RM) es la exploración clave del diagnóstico de estas patologías que afectan al ángulo pontocerebeloso y al conducto auditivo interno (CAI). Las secuencias morfológicas permiten un estudio detallado de los diferentes elementos de la fosa posterior y las secuencias funcionales son una ayuda muy útil para el diagnóstico etiológico de las lesiones. En el caso de un acúfeno pulsátil, la RM permite buscar argumentos a favor de una anomalía vascular de la fosa posterior o de la base del cráneo. La aparición de la RM de 3 teslas con secuencias en tres dimensiones (3D) y recuperación de inversión atenuada por fluido (FLAIR, fluid attenuated inversion recovery) tardías permite obtener más informaciones sobre el diagnóstico positivo y sobre la localización de las distintas afectaciones del oído interno. La tomografía computarizada sigue estando indicada para las lesiones óseas del hueso temporal, las situaciones de urgencia y con un fin anatómico prequirúrgico. La arteriografía es una exploración invasiva que tiene interés antes un procedimiento de radiología intervencionista.