Tras una reseña sobre la fisiología de la sensibilidad donde se citan la naturaleza y la función de los receptores periféricos, así como la formación central de la sensación, se presenta en este artículo la cronología de la recuperación tras una lesión nerviosa, un método de exploración física de la sensibilidad y las etapas de la rehabilitación resultantes. En las lesiones de los nervios periféricos, existe una cronología de reaferentación de los distintos receptores cutáneos que se inicia en las terminaciones libres que garantizan la sensación de protección y, posteriormente, por los corpúsculos de Meissner, los discos de Merkel y los corpúsculos de Pacini, que permiten, respectivamente, la percepción del tacto desplazado y del tacto fijo. El objetivo de las distintas pruebas consiste en definir la calidad de las capacidades sensibles de un momento concreto, establecer una cartografía de la afectación sensitiva y controlar la evolución de la regeneración. La rehabilitación depende de estas observaciones y se adapta de forma muy precisa a cada etapa. Tiene por objetivo dirigir la recuperación de las sensaciones por parte del paciente, permitir una reintegración óptima de la imagen cortical de la mano y acortar el tiempo de exclusión de las zonas insensibles. La rehabilitación sensorial se combina con las rehabilitaciones articular y muscular, y favorece la funcionalidad, ya que una mano insensible es una mano inválida que pierde su destreza.