Reparación del plexo braquial neonatal: técnicas e indicaciones - 04/08/21
Resumen |
Aunque la parálisis neonatal del plexo braquial es una lesión potencialmente grave, la mayoría de los niños se recuperan de forma completa o casi completa y no requieren una intervención quirúrgica. En los pacientes que presentan una parálisis completa (C5-T1), la indicación quirúrgica debe establecerse desde los 3 meses si no se recupera la flexión del codo contra la gravedad, en particular en presencia de signos clínicos indicativos de lesiones graves (p. ej., síndrome de Claude-Bernard-Horner). En las parálisis incompletas proximales (C5-C6 ± C7), la indicación quirúrgica se puede diferir varios meses. La intervención consta de un tiempo de exploración que permite identificar las lesiones nerviosas, resecar el neuroma cicatricial y establecer una estrategia de reconstrucción. Dependiendo del número y de la calidad de las raíces que se encuentren en la exploración, la reconstrucción suele asociar injertos nerviosos, movilizados al nivel de las piernas (nervio sural) e interpuestos entre los muñones radiculares y los troncos seccionados en una zona sana, a las transferencias nerviosas. Las prioridades de la reconstrucción son la función de la mano, seguida de la flexión del codo, la estabilización del hombro y, por último, el plano de extensión del miembro superior. Aunque la reconstrucción nerviosa con injertos se puede realizar hasta los 9 meses, las transferencias nerviosas pueden plantearse hasta los 18-24 meses.
El texto completo de este artículo está disponible en PDF.Palabras clave : Plexo braquial, Parálisis obstétrica, Parálisis neonatal, Transferencias nerviosas, Injerto nervioso, Neurotización
Esquema
Bienvenido a EM-consulte, la referencia de los profesionales de la salud.
El acceso al texto completo de este artículo requiere una suscripción.
¿Ya suscrito a este tratado ?